sábado, 23 de marzo de 2013

Una palabra de ánimo y de esperanza...

Hay ocasiones en las que puedes ir a la Escritura, lees un pasaje y surgen en tí preguntas. Por ejemplo pongamos el Salmo 37 versículo 4, ¿qué dice?

"Deléitate asimismo en Jehová, Y él te concederá las peticiones de tu corazón". 
Aquí la reflexión es: ¿Qué otro requisito te pide Dios para que Él te conceda un anhelo de tu corazón?

Él no está preguntando qué quieres hacer una vez que te haya concedido lo que anhelas, no te pide una razón por la cual se lo pides, no te cuestiona acerca del propósito que tienes al poseer lo que estás pidiéndo a Dios; no, Él sólo te pide una cosa: "Deléitate en mí..."

¿Qué significa esto? Sencillo: que el Señor sea tu mayor delicia en este mundo, y cuando menos lo esperes, llegará el cumplimiento de tu anhelo.

¿Qué opinas?...



0 comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu comentario aquí...